María y Carlos, Sevilla

Nos casamos en Marzo 2018 y, como muchos matrimonios, teníamos la ilusión de tener varios hijos, pero parecía que el plan que tenía Dios para nosotros era otro. Dios siempre escoge el mejor plan para cada matrimonio. En Agosto 2019 una amiga nos envió por WhatsApp una noticia de un periódico que hablaba sobre la Naprotecnología, tecnología de procreación natural que se basa en la fisiología femenina para identificar la ventana fértil de la mujer y las alteraciones que pueden provocar infertilidad. Nos pareció tan interesante que decidimos ponernos en contacto con expertos en Naprotecnología a través de la página web de naprotec.org. A los pocos días recibí una llamada de un matrimonio estupendo, Venancio y Jordina, que nos informó de todo. Nos indicaron qué pruebas médicas debería hacerse mi marido y los pasos que debería seguir yo. 

A pesar de habernos puesto en contacto con Venancio y Jordina, tardamos un año en decidir involucrarnos en la Naprotecnología. Las pruebas de mi marido habían salido bien y mi ginecóloga no creía que tuviera ningún “problema” por el que no pudiera quedarme embarazada. Pero, sorprendentemente, ella me recomendó que fuera a un centro de fertilidad y me informara de las técnicas de reproducción asistida, ya que mi edad (38 años) empezaba a ser crítica. Esto no nos gustó, ¿por qué acudir a esas técnicas si supuestamente no teníamos problemas de fertilidad? Pero por encima de todo, siempre habíamos tenido muy claro que nuestra intención era estar abiertos a la vida de forma natural desde el principio de nuestro matrimonio. Así que rechazamos esas técnicas. Decidimos acudir a otro ginecólogo, el cual nos recomendó lo mismo ya que por la edad no teníamos mucho margen…

Finalmente, optamos por llamar de nuevo a Venancio y Jordina y empezar con la Naprotecnología. Nos puso en contacto con la Doctora Helena Marcos y nuestra vida dio un giro de 360 grados. El trato era increíble (siempre alegre y positiva) y se centraba en resolver los posibles trastornos reproductivos y ginecológicos para así restaurar la salud y la fertilidad y tener un embarazo natural si fuera la voluntad de Dios.

Nosotros vivimos en Sevilla, así que parte de las sesiones las teníamos online, y otras presenciales en Madrid. Tras el estudio de mi ciclo y varias analíticas y pruebas médicas, detectó alteraciones en los niveles de progesterona y de prolactina (hormona relacionada con el estrés, destacamos esto ya que hoy el estrés creemos que es un factor muy importante en la mujer). Todo lo resolvió con medicación y tras sólo 7 meses de tratamiento conseguimos nuestro primer embarazo. También hay que decir que no se trata de un camino de rosas, ya que los efectos secundarios de la medicación fueron un poco duros, depresión, carácter irritable, mucho sueño…. El peque nació en Diciembre de 2021. Es una felicidad que no se puede expresar con palabras. Estamos súper agradecidos a Dios porque puso en nuestro camino a la Doctora Helena Marcos.

También, nos gustaría destacar, que teníamos a toda nuestra familia y amigos rezando por nosotros, al igual que muchos sacerdotes. Yo soy voluntaria de los 10 minutos con Jesús y el día 22 de cada mes todos los sacerdotes de los 10 minutos con Jesús rezan por nuestras intenciones. El 22 de Marzo decidimos pedirles que por favor rezaran por nosotros para que si era la voluntad de Dios que la Naprotecnología diera su fruto. Y ya ves, justo ese mes nos quedamos embarazados. Muchos pensarán que es casualidad, pero nosotros estamos convencidos del poder de la oración.